Estimada editora:

En primer lugar, manifestamos nuestro asombro por la asociación realizada entre la divulgación de noticas sanitarias por prensa no científica y la repercusión económica en la actividad profesional del médico, tal como se expone en la carta a la editora publicada recientemente en Medwave [1].

Coincidimos con los autores en la importancia y repercusión que tienen las noticias en los medios de comunicación. La profesión médica se ajusta tanto a los principios de libertad y veracidad de la información, que los Colegios Oficiales de Médicos provinciales (así como el Consejo General de Colegios de Médicos de España), cuentan con un gabinete de comunicación y prensa que asesora sobre estos temas.

Contamos en nuestro país, a pesar de la intencionalidad torticera de algún medio escrito que emite noticias de “escasa concordancia con la realidad”, con una alta valoración por parte de la población sobre la actividad profesional de los médicos españoles, en especial de la atención primaria [2],[3].

Recordamos que el médico tiene derecho a demandar por difamación a la persona responsable de una noticia carente de veracidad, y al medio que la pública.

Sobre el seguro de responsabilidad profesional, debemos exponer que en España en los años 70, algunos Colegios de Médicos provinciales ya disponían de póliza de cobertura de este tipo. En la sanidad pública se suscribieron las primeras pólizas en los años 90.

El gran avance lo proporcionó la Ley 44/2003 de Ordenación de las Profesiones Sanitarias [4], que en su artículo 46 establece la obligatoriedad de la cobertura de responsabilidad civil. Se amplía en 2007 con la Ley 2/2007 de sociedades profesionales [5], que en su artículo 11 contempla la regulación de la responsabilidad patrimonial de la sociedad profesional y de los profesionales.

Un 60% de los colegiados de nuestra provincia están suscritos a esta póliza, que es corporativa, y que suscribe el Excelentísimo Colegio Oficial de Médicos de Cádiz.

Destacamos la gran repercusión que tiene la ausencia de seguro por parte del médico, pues sin él, debe responder personalmente a las consecuencias económicas que a su actividad profesional ocasionara una posible demanda.

Notas

Conflictos de interés
Los autores declaran no tener ningún conflicto de interés.

Financiamiento
Los autores declaran no haber recibido ninguna financiación para esta carta.

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